Durante el 23 y el 25 de abril se reunieron 13 jóvenes de ON&OFF en la Convivencia de Semana Santa en Alfaro: Tres días para conocernos mejor, jugar, reír, compartir y hacer teatro. Y la noche del miércoles nos convertimos en presos y seguratas de la cárcel y trabajamos juntos para resolver el misterio del cruel asesinato de unos de los presos…
El primer día llegamos por la tarde al albergue de Alfaro. Hicimos algunos juegos de bienvenida para conocernos y romper el hielo. Cenamos juntos en la bodega del albergue. Después de la cena seguimos jugando hasta las doce.
Después una corta noche nos reunimos a las nueve para desayunar y nos preparamos para dar un paseo por la Reserva Natural de Los Sotos en Alfaro. Después de una hora de caminar aprovechamos el entorno y jugamos dos rondas de “La Bandera” y Juan nos torturó con juegos para desarrollar el pensamiento lateral.
Volvimos para la comida y después de la siesta empezamos con la preparación de los personajes del juego de la cárcel. Todas las personas habían recibido una descripción corta con información sobre la edad, nacionalidad, delito de su personaje y el resto lo dejamos libre a la imaginación. Con ayuda de ejercicios de Chekhov empezamos a sentir e identificarnos con nuestros personajes y pudimos usar el tiempo libre hasta el juego para desarrollarlos fisicamente con maquillaje, vestidos y atrezzo. A las 20:30, la hora del juego los presos tuvieron que entrar en sus celdas para empezar a conocer a sus compañeros hasta que las tres guardas los llevaron a la cena. Separados del personal de la cárcel, los presos comieron manteniendo sus personajes y compartiendo sus historias y características. El propio juego empezó cuando uno de los presos empezó a vomitar y tuvo que salir de la cena. Diez minutos después la encontraron muerta con un misterioso aviso aconsejándoles salir de la presión lo antes posible si querían sobrevivir la noche…. Tras casi tres horas de juego, incluyendo intentos de fuga, acertijos, búsqueda de pistas, interrogaciones con los seguratas y encuentros con una fantasma terrorífica, no pudieron salvarse. El resto de la noche la pasamos charlando y disfrutando hasta la mañana del ultimo día de la convi.
Madrugamos, evaluamos el juego de la noche anterior y el conjunto de la convivencia y nos pusimos a limpiar el albergue bailando y cantando. Afortunadamente el sol apareció después de dos días de nubes y frio y pudimos disfrutar del bien tiempo jugando en el jardín al lado del albergue. Reunimos la poca energía que nos quedaba para despedirnos y cogimos el autobús de vuelta a Logroño.